LA ISLA DE SEIN
En la bretaña francesa, muy cerca donde Goscinny y Uderzo situaron la aldea gala y a sus irreductibles, a 8 kilómetros mar adentro, al oeste de Pointe du Raz, está la Isla de Sein.
Conocida por sus peligrosas aguas y sus más de 30 kilómetros de arrecifes que se extienden de oeste a este y que ayudan a proteger la isla, de apenas 58 hectáreas, de los hombres sin valor y los marinos inexperimentados.
Es por esto, que para avisar a los marinos de los peligros de aquellas aguas, se llevaron a cabo en las cercanías de la isla la construcción de varios faros. Uno de ellos, el faro de Ar-men, fue especialmente trabajoso.
Una roca, que tan solo asoma 1,50 metros cuando la marea está baja, bastó para que el hombre la volviese a ganar una batalla al mar. Cuando el tiempo era propicio, los obreros perforaban aquella roca para introducir las futuras barras de empotramiento. Durante el primer año, solo pudieron hacer 15 agujeros, 34 el siguiente. En todo 1870 solo pudieron trabajar 8 horas, 6 en 1873...
Tras 15 años de duros trabajos, de lucha constante contra el mar y la meteorología, de poner en peligro la vida de las personas que trabajaron en aquella obra, Ar- men pudo, por fin, alumbrar las peligrosas aguas bretonas.
Y es la construcción de este faro y la vida durante esa obra en la Isla de Sien la historia y el escenario que eligió Le Floc´h para darse a conocer (gracias al premio Renne Goscinny en el Festival d'Angoulême 2004) al mundo del comic y nos cuenta, con su dibujo simplista y de económico trazo, la historia del arquitecto que lleva a cabo la increíble construcción y su lucha contra las adversidades.
Así nos muestra Le Floc´h parte de su Bretaña natal:
Un saludo.
ARGENTINA (ENTRE RIOS)
Nos detendremos a ver como Zentner y Pellejero (guión y dibujo respectivamente) nos cuentan la historia de un viaje: El de los judíos y su obligada emigración de Rusia a Argentina.
Tras la muerte de Alejandro II, Zar de todas las rusias, los judíos se ven en la obligación de viajar a Argentina (que acababa de promulgar la "Ley de Avellaneda" para favorecer la inmigración por lo vasto y deshabitado de su paisaje) debido a las continuas agresiones que sufren sus comunidades, lejos ya del amparo del antiguo Zar.
El Barón Mauricio Hirsch, poseedor de grandes riquezas, donó buena parte de estas a la Alianza Israelita Universal, entidad que se ocupaba de todos los perseguidos por su condición de judíos. Promovió la fundación de la Jewisch Colonitation Association y aportó 50 millones de francos para que la nueva empresa colonizadora adquiriera cerca de 700 mil hectáreas de tierra en Argentina.
Esta es la historia que utilizan Zentner y Pellejero, este último con su característico y estupendo grafismo y siendo este album el primero donde dará el color directo a su dibujo con un resultado magnífico del que ya vimos una muestra en forma de plancha por aquí, para contarnos las historia y el viaje de Malka y su familia a la lejana Argentina e incluyendo en su relato la vieja leyenda judía del Golem.
Un cómic para no perderse y una entrada esta, que me vale para informaros/recordaros que tanto guionista como dibujante, Zentner y Pellejero asistiran como invitados al Expocómic de este año que se celebrará del 10 al 13 diciembre.
Así mismo informaros que, en el mismo evento, habrá una exposición sobre la obra que protagonizado esta entrada: El Silencio de Malka.
Sin duda, allí nos veremos.
Así nos muetran los autores el largo viaje de Malka:
Un saludo.
UN PASEO POR NUESTRO MEDIEVO
Ya hablamos en su momento, en los comentarios de esta entrada dedicada a Vance, de lo lastimoso que era ver como una serie como esta, casi en su totalidad localizada en el medioevo español, aún estuviese inédita por estos lares.
El Sr. Impaciente, cogió enseguida el testigo e hizo su petición en su blog por si algún editor que creyera en sus posibilidades veía a bien poner fin a este tamaño error.
Yo, por mi parte, y sumándome también a la petición de Pablo voy a hacer una serie de entradas en las que vamos a peregrinar por el camino de santiago medieval de la mano de Vance, el desconocido Jacques Stoquart (que sin embargo firma un buen trabajo a los guiones), y el protagonista de la historia. Ramiro.
En esta entrada vamos a poder ser testigos de excepción del maravilloso dibujo de Vance, lejos de su más exitosa y contemporánea XIII, y la gran documentación llevada a cabo para la realización de esta obra que en Francia se ha editado en dos fantásticos integrales donde se reúnen los 9 números originales de los que consta la serie.
Para esta primera entrada analizaremos los tres primeros números de la serie original.
Un saludo.
Seguimos con el comic de Stoquart y Vance: Ramiro.
En esta ocasión vemos como Ramiro llega a Santiago de Compostela desde Francia atravesando Navarra, Palencia y León mientras seguimos fascinados por el detallista y realista dibujo de Vance.
Para esta entrada me he ayudado del fantástico artículo de Dialnet sobre dos números de este comic (que aconsejo encarecidamente su lectura) y que me ha servido para tomar imágenes de él, así como para saber que cuando los autores hablaban de Molinaseca en realidad estaban retratando el pueblo, también leonés, de Acebo. Cosa esta que nunca hubiese descubierto sin la lectura de tan estupendo artículo.
Para esta entrada hemos analizado los números 4, 5 y 6 de dicha serie.
Un saludo.
Vamos con la última entrega de una serie de entradas dedicadas en esta sección al comic de Stoquart y Vance: Ramiro, publicado en Francia por la editorial Dargaud.
En esta entrada analizaremos los números 7, 8, y 9 de dicha obra. Números en los que se sigue notando una gran documentación, pero que sin embargo no es tan llamativa en el dibujo como en los números anteriores, aunque si en el texto donde, los autores, se muestran como unos grandes conocedores del medievo hispano.
En esta ocasión guionista y dibujante nos llevan a visitar Segovia, Burgos, la sierra madrileña de Guadarrama y Ciudad Real.
En algunos casos las localizaciones no son tan exactas como sucede con el castillo de Alarcos (Ciudad Real) al ser un castillo en ruinas del que posiblemente, cuando Vance dibujó el tebeo, no existía una reconstrucción digital como podemos encontrar ahora. En otros casos el paisaje permite una mayor libertada gráfica como sucede con la sierra de Guadarrama o el bajo Guadiana y en algunos otros, como la torre a orillas del Guadiana donde se desarrolla el final del noveno número, o bien no existe y forma parte del imaginario de Vance, o bien, no he sabido localizarla a pesar de los muchos intentos.
En referencia a lo que se ha hablado sobre la edición del comic por aquí, he de decir que es una obra inconclusa. Vance la abandonó para hacerse cargo de otros trabajos a los que dió prioridad y dejó la serie sin un final. Una pena que, sin duda, hace más dificil que podamos disfrutar de ella por estos lares.
Un saludo.
VISPERAS SICILIANAS
A nadie voy a sorprender si digo que Las Torres de Bois-Maury es, a mi gusto, una de las mejores series de comic histórico que he podido leer. Y lo es por varias razones en las que no puedo dejar de destacar el dibujo de Hermann, y su forma de entender el comic muy cercano al cine, siempre en constante búsqueda de fabulosos escenarios y planos, haciendo de cada título un gusto para la vista, pero hay más…
Hermann hace de sus Torres una serie con un principio y un final, todo perfectamente orquestado y dando un resultado de una obra redonda donde no sobra ni falta nada. Quedando todo perfectamente cuadrado.
Un principio y un final, si. Y sin embargo Hermann, tuvo una fantástica idea para poder dar continuidad a la serie sin que esta se sintiese afectada por el estiramiento a la que su autor la iba a someter. Y, sin embargo, los nuevos números resultan igual de frescos y atractivos logrando, el belga, la difícil tarea de que los nuevos álbunes susciten el mismo interés que los anteriores.
Utilizando como serie padre los números de la ya finalizada Las Torres de Bois-Maury, Hermann, nos cuenta la historia de los descendientes del Sr. Aimar, protagonista principal de dicha serie, y nos hace viajar en el tiempo y nos cambia de lugar, siguiendo el linaje de tan valeroso y obstinado personaje.
Los nuevos capítulos serán todos de carácter autoconclusivos y en cada uno de ellos se nos relatará la vida de un descendiente de Aimar de Bois-Maury. Dando en cada uno de ellos, al igual que en la serie principal, una clase de documentación que pasa desde las ropas de los personajes, hábitos, y forma de comportarse muy en consecuencia con la época histórica a la que, Hermann, nos retrotrae.
Así, aprovechando la noticia de que Norma Editorial publicará en el próximo año el que será el número 14 de esta serie (tercero de ellos que contará con los guiones de su hijo, Ives H.) Dedicaré una entrada en esta sección a cada uno de los tres números autoconclusivos de la serie editados hasta el momento y que llevan el sobretítulo de Bois-Maury, esta vez, sin que Las Torres lo adornen.
En este primer título, número once de la serie y que lleva por título Assunta, Hermann nos hace viajar hasta Sicilia y nos muestra como se desencadenaron los acontecimientos que llevaron a la isla a quitarse de encima el dominio de Carlos I de Anjou en 1282, siendo sustituido este por el de la Corona de Aragón, gracias a la sublevación popular en lo que la historia a querido que se conozca como Las Vísperas Sicilianas.
Un saludo.
EL SUEÑO TOLEDANO
Llegamos al número 12 de una de las mejores series clásicas que se han editado en lo que a comic histórico se refiere ( con permiso de Palacios, Bourgeon y Juillard)
En este número Ives H. (hijo de Hermann) toma las riendas de los guiones y junto a su padre, y el fantástico dibujo de este, no presenta una historia que transcurre en la España de 1325, cuando La Corona de Castilla y su jovencísimo rey Alfonso XI, luchaban contra los ejércitos de Al-Andalus, prosiguiendo la campaña de Reconquista que les llevará desde Toledo a Granada.
Estamos posiblemente ante el peor número de toda la serie. Y lo es principalmente por un guión que intenta escapar del rigor histórico que la serie nos tenía acostumbrados escondiéndose tras un relato onírico y que pretende dar una lección de tolerancia demasiado visible que no llega a convencer del todo. Con un protagonista, descendiente del linaje de de Aimar de Bois-Maury, que no siente ni la lucha, ni el lugar como suyo.
A esto habría que sumar el tema que hoy nos acontece. Muchas de sus localizaciones son parte del inventivo de los autores, y ojo, no digo que esto sea malo, pero en un comic al que se presupone un cierto rigor histórico resulta cuanto menos curioso encontrar un monasterio cercano a Toledo llamado San Gabriel (inexistente), una ciudad amurallada con el nombre de Monterrán (inexistente) y que me he permitido compararla con Jaén y su Castillo de Santa Catalina, o con un líder (desconocido) de la Granada conquistada llamado Rachid Al- Muayyad (¿?)
A pesar de lo anteriormente dicho, hay viñetas que muestran una estupenda documentación (como la del alminar de la Mezquita de Córdoba, que veremos a continuación) y el tebeo, se hace entretenido y, lo más importante, no devalúa el conjunto de la obra.
Veamos algunas de estas localizaciones.
Un saludo.
CUANDO LA LOCA MEG ABANDONÓ EL CUADRO DE BRUGHUEL
Con este número 13 de la serie Bois Maury , llegamos al segundo en el que podemos observar el trabajo de Ives H. a los guiones, y segundo igualmente en el que se nos presenta un historia onírica.
Influenciados por Brughuel “el Viejo“, y más concretamente por el cuadro que lleva el mismo título que los autores han querido dar a su obra (Dulle Griet), Hermann e hijo nos llevan al Flandes del siglo XVI. Para, al igual que el cuadro de Brughuel, mostrarnos los demonios que las personas tienen dentro de si en una historia entre lo fantástico y lo terrorífico, en la que los autores no han dudado en mostrarnos al magnífico pintor como un personaje más del tebeo y la ciudad en la que desarrolla la historia, y los acontecimientos que en esta suceden, como lo que llevó al pintor flamenco a pintar dicho cuadro.
Para contarnos esta historia Hermann e Ives H. nos sitúan en Flandes, pero esto, al contrario del resto de la serie, es un hecho casi accidental pues, la historia, de igual manera hubiera quedado bien en cualquier otra ciudad europea del mismo siglo. Y es que, en este caso. los autores no dan tanta importancia a la parte histórica ni “documentativa” de la obra, lo cual se agradece, pues les queda un tebeo mucho más correcto que “Rodrigo“, en el que intentaron igualmente mezclar los sueños y lo fantástico con lo real e histórico sin mucho éxito.
Como digo, la documentación para esta obra parte sobretodo del imaginario de Hermann que se niega a situar la acción en un sitio concreto de la Flandes del siglo XVI, sin embargo, podemos comprobar como la población que nos enseñan guarda muchas similitudes con la ciudad belga de Brujas y desde ahí, partiré para mostraros la última entrada de esta sección.
Así podemos observar como la ciudad, y más concretamente una de sus torres y el pintor flamenco, Brueghuel, se convierten en protagonistas del tebeo y en sus mejores observadores, atentos en cada viñeta, de la historia que nos cuentan padre e hijo.
No me puedo resistir a mostraros este enlace que he descubierto, mientras buscaba imágenes para esta entrada. Es un interesante post sobre la censura a un cuadro de Brughuel “el viejo” y es que la censura, al parecer, no conoce de tiempo y de lugar.
http://embu2.wordpress.com/2009/02/27/la-censura-esa-vieja-conocida/
Un saludo.
Un saludo.